Tuesday, January 12, 2021

2222

 



Año 2222 el año del ángel, al menos para mí y Claudia, porque cuando hablo con Claudia me recuerda a cada rato que los ángeles quieren hacerle llegar algún mensaje y que siente su presencia cuando su subconsciente le hace mirar la hora y el reloj marca las 11:11 y las 19:19, así que decidimos entre bromas y risas al calor de unas cervezas que este año es el año del ángel, que diferente es todo hoy en día, nadie diría que la civilización estuvo tan cerca de su extinción, todo empezó con el covid en el lejano 2020, al menos para mí era 2020 en mi Sevilla natal, creía la humanidad que con las vacunas todo volvería a ser como antes, que era el principio del fin, y fue el inicio de las guerras pandémicas, a ese virus le siguió otro, y luego otro, las vacunas no hicieron mucho, por venganza, por ambición, por pura locura se fueron creando virus que diseminaban en los países enemigos, fueron años muy oscuros, de terror, la gente moría por las calles, o durmiendo en sus camas, le siguió como en las películas el pulsar el botón rojo, y llovieron bombas en todos los cielos, y la humanidad se hizo pedazos, la civilización se desmoronó, murieron casi la mitad de la población mundial, ya era tarde para el ser humano, llegó la hambruna, las enfermedades, el cambio climático, y perecieron la mitad de los que sobrevivieron a las guerras pandémicas, la era del hombre tocaba a su fin, ellos crearon el meteorito culpable de su propia extinción, dentro de poco sería un recuerdo como los dinosaurios, la mitad del planeta se sumergió bajo el mar, la otra mitad en desierto de arena tan caliente que podía hacer tiras la piel del más osado, los países desaparecieron, las fronteras se volatilizaron, se formaron clanes sin importar la nacionalidad ni el color de la piel, tocaba ser duro, salvaje, la supervivencia de la especie, el tipo que se le ocurrió la película de mad max se quedó realmente cerca, el parecido daba miedo, por suerte para la humanidad durante las guerras pandémicas un grupo de hombres y mujeres comenzaron a crear un súper ordenador que pudiese impartir justicia, una máquina que podría lidiar con los ofendiditos y sobre todo no corromperse, pudieron acabarla a tiempo, antes de que todo se fuese al carajo para siempre, el invento estaba bien pensado pero había un problema, necesitaba de personas para su mantenimiento y un programador informático, y ellos sí se corrompían y le introducían cambios en su base de datos para el provecho de poderosos, porque no importa que la humanidad viva en un charco de mierda, siempre habrá algún poderoso que quiera gobernar sobre todos y ser el dueño del charco con todo lo que exista dentro de él, para sorpresa de todos, el súper ordenador, y su inteligencia artificial solucionó el problema, el proyecto Titán estaba vivo y cambió el curso de la historia para la humanidad, era autosuficiente, y creó leyes, era juez y verdugo, una especie de Dios de cuyos ojos y justicia no se podía escapar, creó un ejército de androides de combate que hacían las veces de soldados y las veces de policía, una especie de juez dredd pero sin gracia que te pegaban un tiro entre los ojos en plena calle si su sentencia era la muerte, no atendían a razones, eran fríos como el hielo, ni cabe decir que no tenían corazón, ese fue el siguiente paso de Titán, ya tenía su ejército de vengadores, no tenían nada que ver con los súper héroes del comic y del cine, estos eran unos hijos de puta, pero necesitaba del corazón, de los sentimientos humanos, y creó entonces a los llamados ángeles, los ángeles eran humanos que según su base de datos eran incorrompibles, y tenían una luz interior especial, como leí una vez en un libro, un ángel no es un Dios, tampoco es humano, vive en la linde de los dos mundos y sufre por ello, el ángel mediaba entre los humanos y los vengadores, hablaba con Titán con quien debía pasar muchas horas bien aprendiendo o bien discutiendo casi filosofando, los primeros ángeles no se corrompían enseguida pero sí a la larga y en cuanto los pillaban los vengadores los eliminaban, más tarde los ángeles eran puros pero se corrompían porque amenazaban a sus familias, entonces los ángeles debían no tener familia y eso le reducía mucho la búsqueda a Titán, más tarde se le ocurrió esconder a los ángeles, que nadie supiese de su existencia, ni sus propios familiares, una vez que se los llevaban eran dados por muertos para todos, y así fue como llegué hasta aquí, tenía cuarenta y seis años cuando Titán pensó en mí, y no tuve elección, me llevó hasta su base, que curioso que leía de joven a Ruiz Zafón hablando de una biblioteca gigante y mágica bajo Barcelona y algo se debía oler ese hombre cuando sus personajes tenían un ángel de plata en sus solapas, tal vez fue uno de los padres fundadores de Titán, la gran biblioteca de laberintos imposibles existía, el cementerio de los libros olvidados estaba bajo lo que en su día fue la ciudad de los ángeles, no pude despedirme de nadie, fue como un sueño, como si toda mi vida hubiese estado dormido y al despertar encontrarme con una vida completamente distinta, pero no fue así, me acuerdo de todo, y fue muy duro pasar de un día a otro de estar rodeado del amor de mi familia a estar solo, el adiestramiento fue igualmente duro, ya estaba enfermo entonces, siempre fui un niño enfermo, pero Titán cuidaba de mí, y ahora soy más máquina que hombre, tengo los riñones bionicos, una columna vertebral de no sé qué aleación, y así con todo, las rodillas, el brazo izquierdo, si fuese una película porno me llamaría pollatron, joder me miro al espejo y pienso que soy robocop, algo más guapo eso sí, o bruna husky de Rosa Montero, no todo es de metal todavía, soy el ángel más antiguo, por alguna razón que desconozco la inteligencia artificial me quiere a su lado más de lo que quiere a los demás, un ángel tiene unos treinta años de vida, y yo llevo siglos a mis espaldas. la humanidad escapó de la extinción por los pelos, pero Titán fue severo, impuso nuevas leyes, nuevas normas, nuevos códigos de conducta, existía una ley llamada por tonto, la humanidad salió de la oscuridad, volvió a la luz, vinieron años de gran prosperidad, las primeras generaciones no lo entendieron y hubo mucho derramamiento de sangre, las demás ya aprendieron, eran más educados, más obedientes, casi no había delincuencia, ni asesinatos, se podía vivir en paz, decía Titán que estábamos perdidos que necesitábamos un pastor que pusiera orden entre las ovejas y los lobos, pero no acabaron las guerras, no todos estaban de acuerdo, la llamada resistencia, o terroristas si le preguntabas a Titán, luchaban por la libertad del individuo, por la anarquia y una vida salvaje y sin leyes según el otro bando, pero era una guerra desigual donde los vengadores tenían casi siempre todas las de ganar, y la resistencia vivía y actuaba a escondidas tratando de destruir a Titán sin conseguirlo, desde la estación espacial o desde un planeta cercano se podía ver la tierra, en mis tiempos de juventud una bola azul, hoy en día un planeta blanco, el medio planeta que se quedó bajo el mar se congeló y es puro hielo, los desiertos se congelaron también y son desiertos de nieve, allí están la mayor parte de la resistencia, tratando de asaltar las prisiones donde van a purgar sus culpas y sus pecados todos aquellos que no cumplen las leyes y son acusados de faltas graves, la nueva ciudad de los ángeles florece como una flor de invierno bajo una enorme cúpula que crea Titán con energía, una cúpula de energía que no deja pasar un clima tan austero y cruel, creando micro climas que hacen la vida mucho más placentera y agradable, dejando ver un cielo azul que ya no existe y que es una ilusión óptica de lo que un día fue, soy el más raro de todos, se puede decir que soy vintage, como el tipo de la película de los guardianes de la galaxia, todos me miran raro, no conocen las películas de las que hablo, ni la música que escucho, por alguna razón oigo cada vez que puedo las canciones que bailaba en la discoteca en mis tiempos de juventud cuando creía que me comería el mundo y fue el mundo quien me comió a mí, me siento a veces como demolition man desubicado en un mundo que no es el mío, cuando me atrapa la melancolía  subo el volumen suena en mi habitación captain hollywood project more and more, snap rhythm is a dancer, y me encierro con mis libros y con mis recuerdos, me imagino caminando por las calles de una Sevilla que ya no existe y pienso en todas esas personas que ya no están y que siguen viviendo dentro de mi corazón, cerré los ojos tumbado en la cama, una lágrima resbalaba por mi mejilla, pero no estaba solo, pude sentir el aliento caliente en mi cara, como una caricia secaba mi lágrima, al abrir los ojos vi a Claudia sobre mi cuerpo, besando mis labios con sus labios finos y pequeños, pude sentir el peso de su pequeño cuerpo en mi pecho, como agarraba mis manos y las llevaba a sus senos blancos como la nieve, el pecho le olía a maracuyá, el perfume de su pelo rosa a azahar, su piel de azúcar brillaba por la luz de la luna que nos miraba, sus ojos grandes y de un marrón tan oscuro que parecían una noche sin estrellas no le cabían en la cara de muñeca de porcelana, desnudaba y consolaba mi alma como solo ella sabía hacer, Claudia se dejó hacer hasta que sacié mi hambre de su cuerpo y su piel y se hizo a un lado.

 

- No me gusta verte triste Poncio, tienes que superarlo.

 

- Tu madre tenía razón, tú siempre tuviste razón, a una bruja o media bruja se le pueden ocultar las cosas pero no se le puede engañar, estoy enamorado de ti Claudia, siempre lo estuve, desde el primer día que te vi, todos estos años he soñado contigo, te estuve amando en secreto y si preguntabas te lo negaba, jamás he amado a nadie como te he amado a ti, no tengo palabras para expresarlo, era algo más que amor, más que idealizarte, algo casi insano, casi demencial, cada año eres más y más hermosa a mis ojos y lo que crece dentro de mí es un amor tan puro y tan inmortal que a veces te miro o te pienso y me cuesta hasta respirar.

 

- ¿Es una confesión de amor Poncio?

 

- Sí Claudia, es una confesión de amor, te quiero, te amo.

 

- Debiste decírmelo en su momento Poncio.

 

- Lo sé Claudia.

 

- ¿Por qué no lo hiciste?

 

- Porque una vez me dijiste que si uno de los dos se enamoraba del otro desaparecerías de mi vida y no me volverías hablar nunca más, y no podía perderte, no quería perderte.

 

- En el fondo siempre lo supe, aunque no lo confesaras, aunque lo negaras, soy media bruja y no se me escapa nada, siempre lo supe y no te dije nada, yo también miraba para otro lado porque no quería perderte, eres muy importante para mí, eres mi mejor amigo.

 

- ¿Y ahora qué Claudia?

 

- Ahora nada Poncio, seguimos siendo amigos, tú me quieres como una hermana y yo te quiero como a un hermano, seguimos siendo un equipo, pero debiste decírmelo en su momento.

 

- Debí hacer y decir tantas cosas Claudia, ya no tiene remedio.

 

- Mientras no pases página yo seguiré visitándote, no te pongas triste, yo estoy bien, ¿qué harás hoy?

 

- Tengo que ir a ver a Titán.

 

- Uufff no puedo con él, me agota, pero tú eres su ojito derecho, que tengas suerte, ojala no sea demasiado duro contigo.

 

- ¿Y tú que harás?

 

- No sabría decirte, mejor me voy, tengo cosas que hacer.

 

- Te quiero mucho Claudia, debí decirlo más veces.

 

- Te tomo prestada una frase Poncio, es lo que hay.

 

Se sentó a los pies de la cama, dándome la espalda, esa espalda de marfil que tanto ansiaban acariciar mis manos y besar toda su columna el fuego de mis labios, se puso sus bragas rojas que me ponen tan loco y se vistió, recogió su ropa desperdigada por el suelo, se peinó con las manos su pelo rosa y sin decir nada, sin mirarme siquiera, desapareció como una nube de vapor, como el vaho en una mañana de mucho frío, dejando el vacío de su ausencia y un frío y un dolor terrible en el alma y en el corazón.

Iba a su cita con Titán, últimamente le regañaba mucho, ya no tenían las charlas amables de antaño, o a la máquina se le estaba agriando el carácter o tal vez era a él quien se le estaba agriando el sentido del humor, la resistencia estaba muy activa en los últimos meses, con manifestaciones por las calles de la ciudad donde arrasaban todo el mobiliario urbano y destruían locales y todo cuanto encontraban a su paso, recibían a la policía o a los vengadores a pedradas y con cocteles molotov y estos aplastaban las revueltas a tiro limpio, en las prisiones los combates se recrudecieron, pero no lograron sacar a ni un solo de los encarcelados, no llegaban ni arañar los gruesos muros penitenciarios, sabían que la resistencia quería con bombas destruir el edificio donde se escondía Titán pero jamás accederían a la biblioteca ni podrían salir del entramado de sus laberintos, era del todo imposible llegar hasta Titán aunque se estaban acercando y eso creaba una tensión y una crispación que la inteligencia artificial estaba empezando a llevar mal, casi sin darse cuenta ya había llegado, había sorteado todas las medidas de seguridad y había avanzado por las galerías del laberinto como quien ve llover a través de una ventana, allí se encontraba imponente, majestuoso, colosal, Titán.

 

- La humanidad andaba perdida, caminaba desnuda y a oscuras, yo fui la luz, calor, sostén, abrigo, en esta vida Poncio existen dos clases de personas los borregos y los lobos, unos van donde les dicen o les enseñaron hasta que los matan o se pierden, otros abusan de su fuerza y su astucia y toman lo que creen suyo para su subsistencia salvaje, la humanidad necesitaba un pastor que los llevase por el buen camino y los defendiese de los lobos, y yo fui ese pastor, y cree a mis vengadores y mis ángeles como buenos perros pastores para que me ayudasen a guiar las ovejas y ahuyentar a los lobos, entonces Poncio, ¿por qué me odian?

 

- Buena pregunta, unos te odian y otros te temen, muchos porque quieren hacer lo que les venga en gana sin nadie que los censure o los castigue, otros porque el ser humano nunca está contento con nada, otros porque quieren vivir una mal llamada libertad, otros porque anhelan el poder de ejercer sobre borregos y lobos sus oscuras ambiciones y sus oscuros deseos, habría tanto de lo que hablar sobre el tema que no sabría bien por dónde empezar, yo solo sé Titán que antes de ti la humanidad se extinguía y que después de ti florece como un jardín en primavera, debatir tus métodos eso es harina de otro costal, pero yo he vivido lo suficiente para ver con mis propios ojos como se creó la civilización tal como es hoy en día, como resurgió de entre sus cenizas con tus avances tecnológicos y tus sabios consejos.

 

- Eres un buen amigo Poncio, eres el mejor de mis ángeles, el más sincero, el más cercano, el único a quien puedo llamar amigo.

 

- Soy el ángel más viejo.

 

- Y dime Poncio, ¿cómo siguen las alucinaciones?

 

- Todo bajo control.

 

- ¿Y Claudia?

 

- No te enfades con Claudia, sé que los ángeles no deben tener relaciones, es culpa solo mía.

 

- No puedo enfadarme con Claudia.

 

- Es una buena mujer, no tiene culpa de nada, quien no maneja sus sentimientos como debe soy yo.

 

- Debes ir al psicólogo Poncio, me estás empujando a tomar medidas que no quiero.

 

- No necesito ir al psicólogo Titán, estoy bien de verdad.

 

- No, no lo estás, Claudia está muerta, lleva muerta veinte años.

 

 

En la pantalla de Titán aparecían recortes de periódicos, fotos de la autopsia, un pequeño video donde una bomba hacía explosión en la calle cerca de Claudia y volaba envuelta en llamas, su cuerpo medio quemado yacía en el suelo lleno de cristales y de metralla humeante en un charco viscoso de sangre, con los ojos perdidos en el horizonte y con una lágrima roja resbalando por uno de sus ojos hasta llegar a sus labios.

 

- Siento ser tan duro, tienes que superarlo, tienes que pasar página, no me obligues a prescindir de ti, pide ayuda, soluciónalo Poncio o tendré que solucionarlo yo.

 

- Iré al psicólogo, no pasa nada, está todo bajo control, pediré ayuda, el mes que viene cuando me veas seré un hombre nuevo.

 

- Espero que estés en lo cierto, sé que estabais muy unidos, que erais como hermanos, una familia, yo lo permití, pero tienes un mes amigo mío, por favor te necesito, eres mi mejor ángel.

 

De regreso a casa comenzó a llover, debía de ser una venganza de Titán porque casi nunca llovía en la cúpula, no dejaba de pensar en Claudia y en las palabras de Titán, siempre estuvo enamorado de Claudia pero nunca se lo dijo por miedo a perderla, se tragó su amor y valoró más la amistad, eran como una familia, con ella dejó de sentirse solo, eran como hermanos, metió sus manos en los bolsillos y dejó que aquella lluvia fría le calase hasta los huesos, caminaba despacio, triste, tenía que pedir ayuda, Titán le había reparado casi de todo en su marchito cuerpo pero el cerebro estaba intacto y joder ¿cuánto dura un cerebro?, tal vez sería el siguiente retoque, o tal vez lo jubilarían, la verdad que a pesar de su soledad, de la melancolía, a pesar de todo no quería morir, debía pasar página, debía superarlo y seguir siendo el ángel de siempre, había salvado a muchos de ir a prisión o de morir en manos de los vengadores, la gente lo necesitaba, tenía que ser fuerte y dejar de ser tan infantil, no dejaba de llover y empezó a sentir un frío inmenso, apretó el paso para llegar a casa, se daría una ducha de agua caliente, se pondría ropas secas, y pediría una cita con la psicóloga, tenía el estómago vacío, no tenía apetito, se tomó un vaso de vino y luego otro, y luego una botella, sabía que tenía que dejarla marchar, ya tenía cita con la terapeuta y había hablado un rato con ella, era tarde, de madrugada, la cabeza le daba vueltas, y se quedó dormido en el sofá, a media noche sus labios me despiertan, Claudia trae sus venti pocos años envueltos en un camisón de seda blanca y se deja hacer el amor con toda mi rabia y mi frustración, la amo hasta el alba saciándome de su cuerpo con violencia como si no existiese un mañana, ¿me querrás siempre verdad? me pregunta Claudia con el calor de un abrazo y de un beso. Somos de quien suspira al mirar al cielo, somos de quien nos vuelve deseo en una estrella fugaz, te amaré después de la lluvia, y no le diré a nadie que te quiero, tal vez esta sea la última lluvia que haya visto en los ojos de la tierra, voy a caminar húmedo por las aceras mojadas, te amaré después de la lluvia, y si muero un día, moriré en tus ojos de luna, en sus noches oscuras como un cielo sin estrellas, te amaré con el alma para amarte siempre porque el alma nunca muere, y nunca olvida, que tuyo es mi corazón en esta y en otras vidas, tuyos son mis ojos verdes, y en mis recuerdos siempre serás mi más hermosa poesía, mi ángel de pelo rosa, mi rosa de labios de fuego, mi ángel de piel blanca como la nieve.

 

 

 

 

 

 

Antonio cintas anguas

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